Los turistas suelen tomar un tour organizado desde Cusco que incluye transporte terrestre hasta el pueblo de Pitumarca y luego una caminata hasta la montaña.

La caminata hasta la Montaña de Siete Colores es moderadamente difícil. El terreno puede ser empinado en algunas partes y la altitud puede afectar a algunas personas, pero en general es accesible para la mayoría de los excursionistas en buena condición física.

La mejor época para visitar la Montaña de Siete Colores es durante la estación seca, que va desde mayo hasta septiembre. Durante estos meses hay menos posibilidades de lluvia y el paisaje está más despejado.

Es importante llevar ropa cómoda y adecuada para caminar, incluyendo zapatos para trekking, capas de ropa para adaptarse a los cambios de temperatura, protección solar, sombrero, agua, refrigerios y una mochila pequeña para llevar tus pertenencias. Además, es recomendable llevar efectivo en soles peruanos, ya que es posible que no haya acceso a cajeros automáticos en la zona.

Es recomendable pasar al menos un par de días en Cusco para aclimatarse a la altitud antes de emprender la caminata hacia la Montaña de Siete Colores. Esto ayuda a prevenir el mal de altura y a disfrutar mejor de la experiencia.